Ratatouille, además de una maravillosa película es un plato típico francés que, en la versión sencilla que traemos hoy, consiste en verduras al horno. Parecido a nuestro Festival de verduras, pero con una presentación más cuidada.
Es el acompañamiento perfecto de cualquier plato, se conserva perfectamente en la nevera y, de hecho, gana sabor de un día a otro.
Utiliza las hierbas aromáticas que tengas a mano: romero, tomillo, perejil… acertarás con cualquiera.
1 calabacín
3 tomates pera
Salsa de tomate (mejor casera)
Pimienta negra
Aceite oliva virgen extra
Sal
Preparación
Precalentamos el horno a 180º C.
En esta receta recomendamos utilizar una salsa de tomate casera ya preparada.
Lavamos y secamos muy bien la verduras. Las cortamos en rodajas de medio cm de grosor aproximadamente. Es importante procurar cortarlas todas de igual grosor.
Sazonamos las rodajas de berenjena y las dejamos sudar durante 15-30 minutos para quitarles el amargor. Una vez pasado ese tiempo, las lavamos con agua y secamos.
Elegimos una fuente apta para horno no demasiado grande en la que pondremos una base de nuestra salsa de tomate. Y ahora nos ponemos con las verduras: alternamos capas de berenjena, calabacín y tomate alrededor de la fuente hasta completar toda la superficie, o terminar las verduras. Empezamos por el exterior y terminamos rellenando el hueco central.
Regamos las verduras con aceite de oliva, salpimentamos al gusto y espolvoreamos con las hierbas aromáticas elegidas.
Lo metemos en la parte baja del horno y dejamos que se hornee durante 40 minutos aproximadamente, hasta que las verduras estén tiernas. Si vemos que las verduras se tuestan demasiado, bajamos la temperatura del horno a 160º C. Cada uno debemos encontrar el punto de nuestro horno.
Una vez comprobamos que las verduras están en su punto, sacamos la fuente del horno y ya tenemos una exquisita y sencillísima ratatouille para disfrutar.
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