Qué ganas de sentarnos y continuar con ese libro que tanto nos está gustando, o ponernos al día leyendo la prensa, o haciendo… nada. Lo que nos apetezca. Qué ganas de tomarnos un tiempo para nosotros, relajados y, a poder ser, acompañados de un aperitivo.
Para esas ocasiones, o para cualquier otra, os proponemos un aperitivo muy sencillo, pero no por ello menos sabroso.
Ideal para cualquier día, para toda la familia, o incluso para ese día que tenemos invitados en casa y queremos ofrecerles algo…
Estos chips de calabacín quedan muy crujientes y acompañados del tahini constituyen una estupenda fuente de fibra, proteínas y minerales.
1 calabacín mediano
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Pimentón
TAHINI:
140 g semillas sésamo
45 ml aceite de oliva virgen extra
Pizca sal
Preparación
Precalienta el horno a 180ºC.
Corta el calabacín en rodajas muy finas (puedes usar una mandolina si la tuvieras) y colócalas sobre papel de cocina con un poco de sal para que suelten el exceso de agua. Déjalas reposar 10 minutos.
Reparte las rodajas de calabacín sobre una fuente de horno preparada con papel para hornear. Rocíalas con aceite. Hornea a 150º hasta que estén crujientes. El tiempo dependerá del grosor de las rodajas.
Cuando estén a tu gusto, deja que se templen y espolvorea con pimentón.
Para preparar el tahini primero debes tostar las semillas en una sartén, sin aceite. Cuando estén doradas y frías tienes que molerlas con un procesador o robot de cocina con un poco de sal y añadiendo aceite poco a poco hasta obtener una pasta homogénea.
¿Qué te ha parecido esta receta? ¿Te animas a probarla?.
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