Y tú, ¿cueces o enriqueces? Nosotros, siempre que podemos, enriquecemos.
Preparar un caldo casero, rico en nutrientes y proteínas con un reconfortante sabor es muy sencillo. Podemos tomarlo solo, como consomé, o incluirlo en diferentes preparaciones de arroces, legumbres, cremas…
Te aconsejamos hacer una buena cantidad y congelar lo que sobre. Así siempre lo tendrás a mano.
5 dientes ajo
3 hojas laurel
2 zanahorias
2 tallos apio
1 manojo perejil
2,5 l agua
Vinagre de manzana
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Preparación
Pela todas las hortalizas y córtalas en trozos medianos. Échalo todo a la olla a presión con un chorrito de aceite y dóralas.
Añade los huesos, el laurel, el vinagre, el perejil y cubrimos con el agua.
Cierra la olla a presión y cocina durante 1 hora.
Cuando se pueda abrir la tapa, retira los trozo grandes y cuela el caldo. Vuelve a poner el caldo a cocer, esta vez sin cerrar la olla, durante otros 15 minutos.
Si no lo vas a consumir en el momento, espera a que enfríe y podrás desgrasarlo fácilmente: la grasa formará una capa en la superficie.
¿Qué te ha parecido esta receta? ¿Te animas a probarla?
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